La situación es esta;
apareces de sorpresa,
la sensación no es amena,
la sangre circula rápidamente
como si fuera sólida y densa,
tu sutil mirada,
al parecer me aniquila,
presa de tu maleficio,
tu demencia;
me quiere volver a atrapar,
con ese encanto tan escondido,
del que desisto y huyó,
hipnotizada puedo quedar
si me descuido y te vuelvo a ver,
con un par de segundos basta y
puedo caer.