Cambiaste mi rumbo,
manifestación de descontrol,
hundida entre mi desolación,
modificaste cada parte de yo,
por un momento pensé que me perdería
mas allá de mil años luz,
pero no;
mantuviste mi atención,
olvide,
y ya no hay review,
como vehemencia...
una especie de estabilidad,
labios hinchados por besar,
atracción,
pero no hay amor.
Así es como te digo adiós,
con un par de lagrimas cayendo en mis mejillas,
con una sonrisa por volverte a ver;
viéndonos cara a cara,
con un poema que te escribí pero nunca te di,
con la confesión más sincera hasta hoy,
con la cabeza cabizbaja porque ya no te veré como antes.
Siendo uno de los cuentos mas cortos,
pero el mas hermoso.
Te marchaste y ya no tuve derecho a detenerte;
mente en blanco,
amor vetado, despojado,
te dejo porque así lo quisiste;
te respeto.
Siendo la necedad más grande de mi vida,
ocultando mi mirada con un par de gafas,
ahora me toco perder.
¿Miedo a que le puedo tener miedo?
mis emociones están flotando...
así están desde que me dijiste hasta pronto;
y un instante pensé que te podría volver a tener.
¿Mentir de que te puedo mentir?,
si ya descubriste lo débil que soy,
¿dolor que más me puede causar dolor?
aparte de verte como tratas de ser feliz
sin mi.
Llanto... que sabe a una ocasión de fracaso
que sabe a derrota y perdición;
desorientación que perdí desde el mes de abril,
por no mentirme y seguir al amor.
Madrugadas que escribo por ti,
tardes que solo resisto
porque no me queda de otra
y se acabo.
Odio el destino,
las malditas coincidencias,
tan lejos, tan cerca;
odio lo que por ti siento,
me odio por ser tan mensa;
porque tengo la respuesta,
pero no voy por ella;
me complico la existencia,
tan lejos, tan cerca,
odio mi situación
que me lastima;
lo complicado de la vida,
mis dudas sin respuesta.
Pude decir tantas cosas,
pude decir que te extraño,
que me haces falta,
solo pude decir ¿cómo estas?
no podía verte a los ojos;
evadía tu mirada.
Y me quede sentada,
llorando,
sin hacer el mínimo esfuerzo
de ir por ti,
y preguntarte si aún me amas.
Mientras tanto todo permanece en su lugar,
el amor que te tengo,
el respeto,
el cariño,
y una magia sorprendente
que sucede sí te pienso,
en esos ojos,
en esa boca,
en ese cuerpo,
pero no se que pase si te vuelvo a ver de nuevo,
si nos encontremos de sorpresa,
mis argumentos no están planeados,
tengo miedo.
Par de meses que tal parece no sirven para nada,
tiempo que parece retrocede y no encaja,
acompañada e incompleta;
tu te engañas,
yo trato de engañarme,
trato de aparentar que parezca que no te estoy extrañando,
que comienzo de nuevo,
que todo ha cambiado,
que te he cambiado,
pero ¿sabes una cosa?
aún te amo.
Como desearía decirte que ya no me importas,
que no me causas nada si te veo a distancia,
que ya no te amo,
y todo ha vuelto a la normalidad,
y como si nada.
Pero la realidad se vuelve abrumadora,
he pensado que no estoy bien del todo,
el panorama de todo lo que puedo pensar,
se torna sin sentido y no me lleva a ningún lugar.
Jugando cada quien por su lado,
viviendo y olvidando,
según tú, según yo;
la luz se apaga,
y te asustas porque ya no estoy;
y yo me aguanto, porque ya no quiero llorar más,
tratando de no encontrarnos por el bien de ambos,
diamantina estelar,
comienzo a delirar,
y el mejor de mis recuerdos sos vos.