Agradécele a tu orgullo
carecedor de argumentos,
a tu inseguridad escondida, en tu apariencia,
a tu calentura,
a tus impulsos,
que no volveremos a estar juntos,
es solo que no quiero volver a verte,
no quiero saber de ti,
gracias por los últimos malos ratos,
por tus palabras hirientes y nunca olvidadas,
gracias por demostrarme que no debí confiar en ti,
gracias por nunca venir,
yo sé que para ti hay cosas mas importantes
que yo para ti,
gracias por poner las piezas justo donde deberían de quedar,
gracias porque al final eres lo que verdaderamente eres.
