Lo admito,
he perdido;
que sus historias
de cuarto de hotel
te han parecido
mas interesantes y entretenidas,
y yo te he aburrido
con mis idioteces,
de querer aprender otro idioma, nuevas cosas,
la maestría,
discúlpame,
no me gusta conformarme,
no me gustan los días de rutina,
detesto ir a los bailes,
beber bacardi y
gastar mi salario embriagándome.