lunes, 7 de julio de 2014

Desistimiento

No valía la pena,
seguir escribiéndote poemas,
quedarme tantas noches en vela,
¿para qué?
no tenía sentido que te escribiera un libro,
¿para qué?
no era buena idea componerte una tonada,
¿para que demonios, para qué?
si un día apagaste mis promesas,
acabaste con mi calma,
destrozaste mi alma.